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COMO se HACE el LÁPIZ LABIAL en la FÁBRICA💄| ASÍ se PRODUCEN 30.000 PINTALABIOS al día

Una fábrica trabaja las 24 horas del día para producir unas 30.000 barras de labios.

A lo largo de su vida, una mujer gasta de media 2.000 dólares en lápices labiales.

Para crear este lápiz rojo brillante se necesitan más de 30 ingredientes,
meses de pruebas y casi una década de investigación.

Pero, ¿cómo se hace el lápiz labial?

Visitamos la fábrica de L'Oréal para descubrir el interesante proceso de fabricación de un pintalabios.

El lápiz labial es una parte icónica de la industria cosmética y ha sido utilizado por siglos para resaltar y embellecer los labios.

A lo largo de la historia, los lápices labiales han sido elaborados con una variedad de ingredientes poco convencionales como cera de abejas,
aceite de pescado, grasa de ballena e incluso veneno de hormiga.

Cleopatra lideró el camino hace más de 2.000 años.
Ella utilizaba hormigas y escarabajos triturados para enrojecer sus labios.

Hoy en día, un tubo de lápiz labial hace el trabajo perfectamente.
No hay necesidad de complicarse con insectos triturados.

Aunque el lápiz labial ha sido utilizado durante siglos,
su popularización moderna se atribuye a la marca francesa Guerlain,
que introdujo el primer lápiz labial comercial en un tubo en 1884.

Esto facilitó su aplicación y lo convirtió en un producto más accesible para las masas.

El lápiz labial viene en un tubo, que también sirve como aplicador.

Solo gira el lápiz y aplica color para que los labios sin brillo luzcan exuberantes.

A lo largo del siglo XX y principios del XXI,
la industria cosmética ha desarrollado nuevas fórmulas y técnicas para mejorar la durabilidad,
el confort y los beneficios para la piel de los lápices labiales.

El proceso comienza en el laboratorio,
donde se realiza el proceso de investigación y se desarrollan los prototipos de lápiz labial.

En la fábrica de L'Oréal se han desarrollado miles de tonos de pintalabios en un laboratorio de tecnología punta.

Para ello cuentan con un equipo humano especializado,
conformado por más de 20 químicos que utilizan la más alta tecnología para combinar los pigmentos en polvo con los demás ingredientes para lograr un lápiz labial perfecto.

Los ingredientes del lápiz labial incluyen ceras, pigmentos e hidratantes.

La especialista encargada de la producción está haciendo una barra de color rojo puro,
que es un color muy intenso.

Para ello mezcla tres pigmentos, dos rojos y uno amarillo.

Pero si se aplicase este polvo, se caería nada más fruncir los labios.

Así que la solución es dispersar estos pigmentos en aceite.

El rojo puro contiene aceite de sésamo, aceite de rosa mosqueta y dos aceites artificiales.

Esta mezcla pasa por rodillos de metal para lograr que los pigmentos se distribuyan uniformemente,
logrando un color rojo puro.

La mezcla se agita vigorosamente para garantizar una distribución uniforme de los ingredientes y para que los pigmentos se mezclen de manera homogénea.

El problema es que esta mezcla es líquida,
por lo que resulta muy complicado colocarla en los labios.

Para lograr crear una barra sólida, la solución obtenida se reafirma con cera.

El color obtenido quedará atrapado en la cera hasta el momento que se aplique el lápiz labial,
que liberará todo su color en los labios.

Sin embargo, falta un elemento crucial, un toque de brillo.

Para dar brillo a los labios y lograr una sonrisa radiante,
se utilizan partículas conocidas como partículas de perla.

Se trata de capas brillantes de mica,
dióxido de titanio y óxido de hierro,
capaces de reflejar la luz en distintas formas en función del ángulo desde donde se observen los labios.

En este laboratorio tienen una extensa gama de partículas de perlas que los especialistas pueden seleccionar para dar un brillo único y original a los labios.

El último paso es crucial, se trata de aplicar el calor adecuado para que el lápiz labial se diluya y adquiera la estructura correcta.

Luego de aplicar calor, la solución se vierte en un molde,
para lo cual se requiere de manos expertas que mantengan un movimiento regular para que el líquido se introduzca en el molde de forma homogénea.

De lo contrario, la cristalización se daría por capas y el labial no tendría la estructura deseada.

Estos moldes están diseñados para dar forma y tamaño a los lápices labiales.
Tienen múltiples cavidades para producir varios lápices labiales al mismo tiempo.

Una vez lleno, el molde con 24 barras de pintalabios se lleva al frigorífico.

Los moldes se colocan en un área de enfriamiento para que la mezcla se solidifique y adquiera la forma del lápiz labial.

Una vez que la mezcla se ha enfriado y solidificado,
los lápices labiales se retiran cuidadosamente de los moldes.

Se verifica que los lápices labiales tengan la forma y la consistencia adecuada y se descartan aquellos que presenten defectos o imperfecciones.

Tras unas horas, los lápices labiales estarán listos para una rigurosa prueba.

Uno de los científicos de laboratorio realiza las pruebas sobre las nuevas creaciones con la colaboración de una modelo de labios a quien se le coloca el lápiz labial para realizar una sesión fotográfica.

Se toman fotografías desde todos los ángulos y con distintas condiciones de luz.

Unas condiciones con mucha luz ponen a prueba el brillo de la barra de labios.

Una atmósfera moderna simula una luz uniforme para examinar el color.

Con ayuda de un software especializado se analizan las fotografías.

Este programa es capaz de analizar el color y el efecto de calado de la barra de labios.

Este efecto se produce cuando el lápiz labial dibuja líneas finas alrededor de los labios.

Cuando el efecto es cero, se tiene un producto de excelente calidad listo para pasar al proceso de producción.

Aquí producen 30 barras de labios distintas.

Este proceso se realiza en una planta industrial en la que se produce una gran variedad de labiales con diversos ingredientes.

En este caso, el lápiz labial rojo puro se produce con la receta obtenida en el laboratorio.

Los ingredientes se utilizan en una cantidad mucho mayor,
ya que no se van a producir muestras de prueba,
sino los lápices labiales que saldrán al mercado.

Una trabajadora pesa todo siguiendo una fórmula.

Las mezclas exactas suelen ser un secreto de la empresa.

Vierte los ingredientes medidos en una olla.

Los pigmentos que vienen en grandes bolsas se mezclan en un gran recipiente junto al aceite de sésamo,
el aceite de rosa mosqueta y los dos aceites sintéticos.

Seguidamente esta mezcla se cocina para después añadir las partículas de perla,
el perfume y la cera.

Estos ingredientes actuarán como suavizante de la piel y también permitirán que el lápiz labial se aplique con suavidad.

Las ceras también darán al lápiz labial un cierto brillo al aplicarlo.

Se vierte pigmento hasta que la mezcla espese y se vuelva cremosa.

Ahora tiene la consistencia adecuada para ser moldeada en lápiz labial.

Pasa a la siguiente estación, donde otra trabajadora vierte el líquido de lápiz labial en una máquina de llenado.

Después de dos horas, la mezcla está lista para ser vertida en cajas plásticas.

Este sistema de llenado también tiene un mezclador que mantiene la consistencia cremosa.

En ellos la solución se enfría y se solidifica,
formando bloques que son llevados posteriormente a la línea de producción,
donde son cortados.

Los trozos son introducidos en las máquinas moldeadoras, que son supervisadas por personal experto.

Coloca un molde debajo de la máquina de llenado y activa un elevador.

Lleva el molde a las boquillas que bombean el líquido de lápiz labial en los espacios del molde.

Los moldes se llenan con la mezcla caliente y luego se tapan.

Los lápices labiales desmoldados se inspeccionan visualmente para detectar cualquier defecto o imperfección.

El sistema trabaja de forma continua las 24 horas del día.

Los tres equipos de producción se encargan de fabricar unas 30.000 barras de pintalabios al día,
más de 2.000 cada hora.

Estas barras se introducen en un tubo giratorio que facilita la aplicación del labial y luego se les coloca la tapa.

Este sistema de tubo giratorio fue inventado en 1923 y por más de 100 años ha mostrado ser altamente eficiente para ayudar a mujeres de todo el mundo a lucir todos los días unos labios hermosos y radiantes.

Un probador toma muestras de lápiz labial de cada lote para determinar el punto de fusión.

Esto es importante porque el lápiz labial debe ser lo suficientemente estable,
como para no derretirse en un bolso en un día caluroso.

A continuación, el lote de lápices labiales es empaquetado cuidadosamente.

Para evitar que sufran algún daño durante el almacenamiento,
se etiquetan y quedan listos para dejar la planta de producción.

Desde donde es enviado a las diferentes tiendas,
para que pueda ser adquirido y disfrutado por las mujeres que adoran lucir unos labios hermosos y una sonrisa radiante.